Un cuento bellísimo, toda una creación que nos habla, en principio, de caballos felices que viven en el campo.Es la historia de un potro negro, narrada por él mismo, en donde los caballos, después de abandonar el campo para ser vendidos, atraviesan por mil penalidades, hambres, fiebres y golpes. Aquí o allá surgen amistades que se trucan porque alguno pasa a ser de otro dueño.En su azarosa vida, Belleza Negra y sus ocasionales amigos conversan, comentan y opinan acerca de los humanos, y sus opiniones no siempre son favorables, a veces ni para los niños malcriados, que desgraciadamente abundan. Censuran sobre todo a quienes piensan que las bestias sólo están al servisio del "rey de la creación".Belleza Negra se encuentra por vez primera con el tren y cree que se trata de un monstruo que viene a devorarlo, pero luego se da cuenta que solamente pasa de lado.Anna Sewell otorga a los caballos características humanas y los ubica en situaciones tan diversas como reales, bajo la tutela o la opresión de los hombres. Así Belleza Negra, el narrador, conoce a otros caballos que le cuentan sus historias, luego deja de verlos y a la vuelta del tiempo los encuentra decrépitos y tristes. En fin, no faltan los amos bondadosos, las cuadras cómodas y las escenas conmovedoras que nos hacen sentir que los caballos como los demás animales, son capaces de gozar y sufrir y que, además, juegan a veces papeles muy importantes en las vidas de sus amos.
