La casa junto al camposanto empieza con la narración de un hecho macabro: el desentierro accidental de un cráneo que muestra evidentes signos de violencia y, cosa aún más extraña, un agujero, como si hubiera sufrido una trepanación.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información