El arrepentimiento suele llegar tarde, y eso cuando llega. Pero no sabemos si los j?venes cuyas tribulaciones se cuentan aqu? son realmente insensatos, ego?stas, crueles, retorcidos, incapaces de sentir empat?a y arrepentimiento, o solo se esmeran por parecerlo. A veces, entre las clases y los ex?menes, las visitas al psic?logo, las muchas drogas y el poco o mal sexo, incluso parecen interrogarse moralmente. Lo que respondan ya depender? del azar y las hormonas.