Un joven pintor se enamora de una hermosa heredera
rica de conducta intachable y es correspondido
emocional, pero no materialmente: la dama ya ha sido
comprometida con un noble y se atiene a su compromiso.
Ajena a la conspiración promovida por el otrora Sir
Percival Glyde con ayuda del malvado conde Fosco para quedarse con su herencia, se casará pero pagará un alto precio por haberlo hecho. La historia se convierte en un complicado entramado de incidencias oscuras, confabulaciones y fingimientos, donde la tenacidad del amor verdadero será la única arma para evitar un crimen.
Esta historia parte de un hecho real: una noche de
paseo por Londres, Collins junto con unos amigos, vieron a una mujer vestida de blanco que les pidió ayuda y desapareció misteriosamente. La mujer, acosada por un marido trastornado, era Caroline Graves con quien el autor iniciaría una relación amorosa que duraría toda su vida. Esta anécdota será el pretexto para que, con su capacidad inigualable logre urdir esta maravillosa novela en la que varias voces a razón de testimonios registran un mismo misterio, de forma tal
que los lectores son jurados y tendrán que deliberar.
