BERG, MONICA / POSSENTINI, SONIA
Soy apasionada, y esto es personal. Y puede ser personal para ti también. Todos hemos experimentado el nerviosismo del primer día de clases. Para aquellos con una diferencia en el aprendizaje, esta sensación dura todos y cada uno de los días del año escolar. Tal como fue para mi hija Abigail, quien fue diagnosticada con dislexia a los ocho años de edad. Antes de que Abigail pudiera leer, cocreamos El don de ser diferente. Este libro se volvió parte integral de su vida diaria. Abigail escogió redefinirse por esa diferencia en el aprendizaje: decidió no sentirse avergonzada o tonta. Uno de los mensajes más poderosos en El don de ser diferente es que las mismas cosas que te hacen diferente pueden ser tus fuerzas más grandes. Este puede ser tu superpoder. Abigail no leyó con habilidad hasta tercer grado escolar. Pero tenía una voz. Y creyó en ella misma y en su historia. Así que nos sentamos a escribir un libro para niños que invitara a los lectores a aceptar las partes de ellos que sienten diferentes. A los ocho años, Abigail aprende que tiene un superpoder, aunque no se siente muy especial por ello. De hecho, se siente un poco tonta. Con la ayuda de su mamá, se da cuenta de que su superpoder un diagnóstico de DISLEXIA es realmente muy interesante, púes le permite pensar y resolver problemas de manera singular. Abigail descubre, así, que esa diferencia es el mayor Don de todos