Dorothy, la niña heroína por azar, alterna a lo largo de la historia con tres personajes, tan fantásticos como simbólicos e impregnados de su propia lógica, los cuales dejan un mensaje de solidaridad, persistencia y cooperación, cualidades tan ne~esarias en cada uno de nosotros. Todos los personajes, las situaciones y los lugares, son producto de una rica imaginación, que en ningún momento cae en la explotada fantasía tradicional, es decir, se trata de una historia diferente, ingenua, graciosa y amena que divierte al lector niño o adulto. La filosofía de luchar contra el mal y practicar el bien, adquiere en El mago de Oz un carácter realista y festivo a través de Dorothy; del espantapájaros con vida, pero sin cerebro; del leñador de hojalata sin corazón y del león cobarde que busca su valor, así como del enigmático mago que cae en un final inesperado. El mago de Oz es un clásico que ha triunfado, tanto en su versión literaria como en la teatral y musical. En esta edición profusamente ilustrada se mezclan los cuentos de hadas y la narrativa filosófica.
