Fudge está de vuelta y vuelve loco a su hermano Peter, como siempre. Este huracán humano de cinco años es más problemático que nunca. Su último plan es casarse con el enemigo jurado de Peter, Sheila Tubman (¡qué asco!).
Pero los problemas de Peter están a punto de empeorar. Sus padres han decidido compartir una casa de verano con los Tubmans. ¡Y Peter se quedará con Fudge y Sheila la Reina Cootie durante tres semanas completas!
Será un viaje inolvidable (e hilarante) para ambas familias, lleno de viejos amigos y nuevos amigos, muchas sorpresas y muchas risas. Puede que no sea la vacación de los sueños de Peter.