Muchas personas creen que la dirección de un proyecto consiste en arduas tareas de administración, gestión o supervisión, cuando los proyectos de éxito se caracterizan por la pasión. Pasión por alcanzar un objetivo compartido con compañeros, clientes y proveedores. Más que nunca los líderes de proyectos deben saber trabajar en equipo y, mediante las técnicas de facilitación y presentación visual, compartir objetivos, tareas, riesgos y todos los elementos inherentes a un plan.