Las empresas como conjuntos de actividades productivas conectadas y coordinadas por reglas sociales no son cajas amorfas de asignación eficiente de recursos, sino entidades concretas que se forman en procesos históricos e interactivos de las estructuras institucionales de la producción, las empresas proveen con diferentes mecanismos de coordinación focal basados en diversos arreglos institucionales. La coordinación institucional se construye en procesos causativos ascendentes y descendentes que abarcan diferentes niveles internos y externos, relacionando actor, empresa y entorno. Las principales formas de coordinación institucional en la empresa son la diseminación de información, la formación de capacidades y la estructuración de las interacciones. Este libro ofrece una perspectiva novedosa de análisis económico que se informa de las diferentes corrientes de la economía institucional y evolutiva contemporánea, cuyos conceptos centrales compara y clasifica.
