La Educación Emocional es un proceso educativo, continuo y permanente que pretende potenciar el desarrollo de las competencias emocionales como elemento esencial del desarrollo humano, con objeto de capacitarle para la vida y con la finalidad de aumentar el bienestar personal y social (Bisquerra, 2000). El objetivo principal de la Educación Emocional es el desarrollo de competencias emocionales, sus objetivos complementarios son: Adquirir un mayor conocimiento de las propias emociones, Saber identificar las emociones de los demás, Aprender a conectar con las propias emociones y aprender a sentirlas, Aceptar y acoger los propios sentimientos, Denominar a las emociones correctamente.