Soy un inveterado viajero, he leído, visto y oído mucho, y sonado mucho más. Podemos preguntarnos cuanto de sueño y cuanto de realidad hay en este libro que tienen entre sus manos...está fundado en hechos rigurosamente históricos. Sea cual fuere la respuesta nada vale cuando uno cruzando la noche del bosque, se encuentra cara a cara con el jinete sin cabeza que regresa de su tumba.