La rana de este cuento aprenderá una gran lección gracias a dos mosquitos traviesos que se las ingenian para escapar de su barrigota hambrienta. En este cuento el humor y la imaginación van de la mano. ¡A leer!
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información