Como todo el mundo a los veinte años, Ryan Cusack está intentando averiguar quién es. No es un buen momento para que su jefe aproveche su doble nacionalidad y abra una nueva ruta de narcotráfico entre Italia e Irlanda. Ni tampoco es la mejor ocasión para que su adorada novia decida que es un corrupto sin remedio y lo abandone. Y, definitivamente, desearía no haber llamado la atención de una huraña abuela que se cree su salvadora. Quizás hay una escapatoria del caos en las propuestas empresariales del promotor musical Colm y en las atenciones de la encantadora e impulsiva Natalie. Pero ahora que las ambiciones de su jefe han sacudido la ciudad, Ryan está a punto de averiguar de qué pasta está hecho, y de si lleva o no el caos en la sangre.