Max tiene dos problemas: primero, su familia se muda constantemente y él siempre está entrando a nuevos colegios; segundo, en los nuevos colegios siempre hay nuevos maratones. Afortunadamente, Max tiene un ángel de la guarda... muy especial.
Esta divertida historia, a la vez que entretiene, enseña a enfrentar los problemas de la vida diaria.